La movilidad es esencial para que las personas participen en todos los aspectos de la vida, tanto personal como profesionalmente. Sin embargo, hay personas con algún tipo de discapacidad (temporal o permanente) para las que desplazarse en nuestra ciudad puede suponer una barrera. Una ciudad accesible debe permitir y facilitar que sus habitantes puedan desplazarse cómodamente, con independencia de sus limitaciones físicas y/o sensoriales.
Auvasa está comprometida activamente con la mejora en la accesibilidad en el transporte público. Desde el año 1997, todos los vehículos incorporados a la flota de AUVASA han sido reflejo de este compromiso, con la incorporación del piso bajo con inclinación lateral. A finales del año 2017 contamos con 150 autobuses con piso bajo (100% de la flota) y con 103 autobuses con rampa de acceso para silla de ruedas (68% sobre el total de la flota y 100% sobre el nº de vehículos asignados habitualmente en línea). Todos los vehículos dotados de piso bajo y/o rampa de acceso para silla de ruedas tienen reservado al menos un espacio para sillas de ruedas, así como asientos reservados para personas de movilidad reducida (de acuerdo con la normativa vigente).
Disponemos de 76 autobuses dotados de un sistema de información visual y sonora que avisa a los viajeros de la siguiente parada de paso, además de proporcionar información de la línea y destino al exterior del autobús cuando este llega a la parada y abre sus puertas.
La distribución de vehículos en servicios a las diferentes líneas se realiza teniendo en cuenta, entre otros, criterios de accesibilidad, asignando vehículos dotados de rampa de acceso para silla de ruedas a aquellas líneas con un mayor grado de utilización por parte de personas con limitaciones físicas en este sentido.